La Organización Mundial de la Salud (OMS) definió como Automedicación, al uso de medicamentos que realizan las personas para sí misma, sin prescripción médica. Por otro lado, también la OMS define como Prescripción Médica, a la indicación de medicamentos adecuados a una patología con la posología y dosis correspondiente a peso, edad, teniendo en cuenta otras enfermedades que padezca y otros fármacos que reciba. La misma debe ser realizada mediante una receta, y define a esta última, como Documento Legal por el medio del cual el médico realiza la prescripción.
De esto se desprende que la indicación de una medicación no es un acto de menor importancia. Sin embargo es conocido el hecho de que en Argentina la Automedicación existe y que se expenden remedios no sólo en las farmacias, sino también en lugares no habilitados como Kioscos por ejemplo. El uso de medicamentos por iniciativa propia es una práctica cotidiana y habitual, aún con el riesgo de no utilizar el fármaco adecuado en el tiempo y dosis que corresponde. Precisamente la OMS informó que el 50 % de los medicamentos que se prescriben, dispensan o venden, se realiza en forma inadecuada.
Veamos algunos ejemplos
Antiinflamatorios y analgésicos: La automedicación de estos medicamentos es una práctica extendida en todo el mundo, con poca intervención educacional para disminuir ésta práctica común y riesgosa. Recientemente la UBA realizó una investigación en la ciudad de Buenos Aires para evaluar la frecuencia de automedicación de antiinflamatorios. El estudio concluyó que la prevalencia era del 34 %, siendo más frecuente en personas de sexo femenino y en ancianos. Estos últimos tienen una disminución fisiológica de la función renal y Hepática, por lo que las dosis y tiempo de uso deben ser adecuados a esa situación.
Protectores gástricos: El Omeprazol es un inhibidor de la bomba de protones de las células de la mucosa gástrica. Por lo que debe ser usado en el momento del día adecuado, a la dosis adecuada y teniendo en cuenta la utilización de otros fármacos ya que disminuyen la absorción de muchos de ellos. Si bien estos medicamentos tienen expresa indicación para determinadas enfermedades, se suelen usar como prevención de los efectos de un exceso de comida o bebidas y muchas veces esto puede ser contraproducente.
Antibióticos: El mayor problema de estos medicamentos es que muchas veces se usan para patologías, generalmente virales, en las que el fármaco no tiene ningún efecto. Además generalmente se usa en dosis inadecuadas y en tiempo menor de lo necesario, y esto contribuye a que se desarrolle progresivamente Resistencia Bacteriana, con la consabida consecuencia, de que los Antibióticos van perdiendo su efectividad con el paso del tiempo.
Por último la OMS ha planteado el tema de Automedicación Responsable, como una fórmula válida en las Sociedades desarrolladas, para el uso de medicamentos clasificados como Especialidades Farmacéuticas Publicitarias (EFP), que son las únicas de las que se puede hacer publicidad dirigida a la población. No obstante para lograr esto se deberá progresar en la Educación Sanitaria de la Población, con la estrecha colaboración de la Salud Pública, médica y farmacéutica.
Dr. Roberto Báez
MP: 1524
Clínica Roca S.A.